viernes, 10 de junio de 2011

OPORTUNIDAD


Qué miraré sin los ojos perdidos,
Sin horizonte a la vista,
Sin apenas aire alrededor.
Un desierto ausente, por ejemplo.
Hacia dónde mirar
En un mundo de imágenes y rostros
que huyen de la verdad,
en un mundo estándar, sin reposo
para el que quiera mirar
donde habito yo, que casi no existo,
Que no nací apenas ni moriré jamás
Por lo tanto.

Yo, incapaz de atrapar
un miserable pensamiento
que pueda considerarse útil;
yo, que no entiendo
las leyes ni los plazos
a los que me someto,
no merezco dejar efímeras huellas
ni la atención de la audiencia,
ni tampoco despertar algún día
Por ejemplo herido de bala,
Por ejemplo sepultado de arena,
A pesar de todo.

Monstruosidad entre el rebaño,
camino confuso como un reloj,
Como todos los relojes,
Sin intención de ser mejor
Al parecer;
Sorteando minutos de intereses,
Tambaleándome por segundos
Asuntos o documentos
Que mienten y juran a la par,
Que recuerdan a los héroes
que no regresan de ningún lugar
por extraño que parezca.

Qué respeto de ustedes merezco,
Qué respeto merecerán
El temblor de mis miembros
Y el ronquido de mi permanente sueño.
Qué signos de vida traduzco
Sin poseer un nombre siquiera
Como una guerra cualquiera,
Si duerme mi pobre inteligencia,
Si mi memoria rebosa
calificativos indefinidos,
vacíos de siglos de historias anónimas,
personajes sublimados o fechas o hitos,
por supuesto.

El mismo peligro que se cierne
Sobre los despistados,
Sobre los débiles,
Sobre los manipulados,
Sobre los valientes,
Sobre los confiados,
Sobre los rebeldes,
Sobre los conformados,
Amenaza mi sombra
De árbol o niño mudo
Ajena a tanta desgracia.

Detrás de mi persona,
Bastantes vidas atrás,
quedó la conciencia que olvidé:
soy un error de muchos errores,
un error asimilado por nuestra rutina;
error que condena la evolución humana,
error que demuestra nuestra ignorancia
y discute la confianza divina.

Oculto mis deformidades
Bajo la hipocresía
Que no permite dudar
de los sueños que ha inventado,
de los sueños que perseguimos sin pensar.
Silencio la otra realidad
Que creemos esquivar
con mitos y comodidad,
con luces, sombras
y alguna que otra preocupación banal.

En esta hoja en blanco
No engaño, sin embargo,
si digo que espero nacer,
Que espero una señal
Mientras naufrago,
Mientras me ampara
la multitud igual.
Repito un ciclo vital
Llorando por la oportunidad
Malgastada cada jornada.
A la oportunidad venidera
Que despreciaré mañana
Le dedico estas palabras.

1 comentario:

  1. Sabias palabras,
    agria coincidencia...
    ...de pareceres.
    Hay que seguir,
    no cabe la menor duda,
    hay que seguir...

    Josep.

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